Pasa un día y otro día más y ahí sigue, el dolor penetrante. Las náuseas persisten, la luz se convierte en un gran enemigo, que ya no puedes tolerar e incluso has pasado por una fase de vómitos. ¿Los reconoces? Sí, son los sítomas de la migraña. Cualquiera que haya convivido con este dolor o que haya padecido un dolor crónico sabe lo difícil que resulta… más que difícil, es incapacitante, frustrante, agobiante… agotador. ¿Quieres liberarte por fin de ese sufrimiento?
Recientemente, los neurocientíficos han señalado que la causa de la migraña parece ser el resultado de un desequilibrio en la actividad cerebral. Esta inestabilidad provoca que ante determinantes desencadenantes se pongan en marcha una serie de eventos neurológicos y bioquímicos que alteran el sistema vascular y terminan activando las terminaciones del dolor del nervio trigémino. Por otra parte, se cree que el origen del dolor crónico se debe a un problema en la forma en que los mensajes de dolor se producen y se reciben en el cuerpo por el sistema nervioso central (cerebro, médula espinal y nervios), lo que podría explicar las constantes sensaciones de dolor. La buena noticia es que, en ambos casos, podemos ayudarte a controlarlo.
Tradicionalmente el tratamiento de la migraña y del dolor siempre ha pasado por la prescipción de medicamentos para tratar los síntomas y paliar una posible réplica, pero actualmente existen terapias alternativas (o complementarias) a la medicación, como el neurofeedback y el biofeedback, para todas aquellas personas que no quieran medicarse o no toleren bien la medicación recomendada para su caso.
Combinando ambas técnicas, neurofeedback y biofeedback, es posible entrenar a la persona para que pueda reducir la inestabilidad de la actividad cerebral y las reacciones al estrés. Una vez estabilizado, los procesos bioquímicos que desencadenan las sensaciones de dolor se reducen, o incluso desaparecen, haciendo que la frecuencia de ataques migrañosos o de dolor sea mucho menor e incluso puedan llegar a eliminarse en algunos casos.
Como siempre, empezamos por una entrevista con el/la paciente, en la que podamos evaluar el problema. Así recabamos toda la información para estudiar en profundidad cada caso y acotar bien las posibles causas y el alcance del problema. Cuanto más afinado sea el diagnóstico, más específico (y más eficiente) resultará el tratamiento.
Realizando un electroencefalograma cuantitativo, completamente indoloro, podemos informar a la persona (se le da feedback) en tiempo real de qué es lo que está pasando en su cuerpo y cuáles pueden ser las causas de los dolores. Se practican diversas estrategias para descubrir en qué forma la propia persona puede cambiar esta actividad. El mapa cerebral permite llevar un control de los cambios y del progreso conseguido con esta terapia así como cualquier otra en la que se intervenga sobre el cerebro.
No hay un número de sesiones fijo, esto varía dependiendo de cada paciente, de su cuerpo y de su grado de compromiso con la terapia. Lo que sí podemos decir es que, como sucede en cualquier entrenamiento, la mejoría es progresiva, pero pronto se empiezan a notar los primeros avances. En cualquier caso, nosotros nos comprometemos a que el paciente no hará más sesiones que las que sean necesarias para su caso.
Eso es lo más importante para nosotros: liberarte del dolor y que aprendas a gestionar tus sensaciones. Nosotros te proporcionamos las herramientas para que puedas vivir de forma tranquila, sin la incapacidad, frustración y bajones anímicos que provocan las migrañas y los dolores crónicos. Queremos que tu vida te pertenezca a ti y siempre estés en condiciones de disfrutarla al máximo.